Sara Biassu | Analogías
Sara Biassu | Artista Visual. Su trabajo artístico surge de la reflexión de su conciencia emocional y su necesidad de expresarse buscando la esencia de la vida y el significado de esta en cualquiera de sus aspectos, desarrollando plásticamente percepciones, recuerdos y sentimientos. En constante aprendizaje, presenta obras despojadas de accesorios superfluos, con un trabajo muy personal en constante evolución.
sara, biassu, subias, sara subias, sara biassu, artista, visual, artist, zaragoza, fuentes, ebro, fuentes de ebro, escultura, escultura zaragoza, exposicion, exhibition, pintura, arte, ceramica, ceramica zaragoza, españa, spain, visual artist,
21823
page-template-default,page,page-id-21823,ajax_fade,page_not_loaded,,select-theme-ver-1.9,wpb-js-composer js-comp-ver-4.4.3,vc_responsive

En  Analogías  podéis  encontrar  textos  escritos  para  algunas  obras.

No  todas  las  obras  tienen  un  texto  específico, pero  sí  un  significado  concreto;

y  no  de  todos  estos  textos  encontrareis  su  analogía  correspondiente  en  Galería

Ambas  son  una  selección

MÁS ALLÁ DEL SILENCIO

Detrás del silencio de quien calla, de quien se oculta y de quien teme vivir, hay alguien que sufre.

Pero el silencio no es solo portador de miedo, desánimo, insatisfacción y vacío, también es sinónimo de calma, reflexión, descanso y lucidez. El silencio es parte de la oscuridad, pero también es parte de la luz, de ahí la importancia de conocerlo, aprender a convivir con él, sacar todo su potencial y recorrer el camino necesario para transitarlo con éxito y continuar.

Más allá del silencio es una muestra de diferentes estados surgidos de la adversidad, que analiza las consecuencias que trae consigo la inestabilidad emocional que crean; sea cual sea su causa.

Ofrece un recorrido en el que observar y sentir las partes de una vida que, con sutileza, trata sentimientos como la tristeza, la frustración y la soledad. Como un juego en el que ir descubriendo etapas de mayor complejidad a superar y en el que poder encontrar un mensaje de aceptación y superación al finalizar, con una moraleja que nos acerca a la solución: tan simple como compleja, e incluso, a veces, imposible. La respuesta, siempre en uno mismo.

Esta propuesta es solo una de muchas historias. Creada para poder descubrir el dolor sin que duela, con sinceridad y de frente, sin esquivarlo ni silenciarlo; para poder comprenderlo por incómodo que resulte y a pesar de su tabú. Visibilizando la problemática para evitar sobrevivir con una coraza. Identificando la infelicidad para poder afrontarla y gestionarla, sacándola de dentro para no ser devorados por su oscuridad, pudiendo volver a ser completos y recuperar la ilusión que nunca deberíamos haber perdido.

En un mundo tan hermoso como perverso; tan perverso como hermoso.

DE SANTA PACIENCIA A MÁS ALLÁ DEL SILENCIO

Cuando más que a vivir, la adversidad nos lleva a sobrevivir e incluso a desear dejar de hacerlo, somos esclavos de su voluntad.

Esta exposición surge en el centro de mi universo, mi casa, y se comienza a mostrar como catarsis en la Galería de Arte A Ciegas de Madrid en el año 2022. Entonces, como aquí, la exposición narraba el viaje de alguien que sufría, que permanecía en la oscuridad y necesitaba volver a ver la luz. De quien, para sanar, debía aceptar y aprender a vivir en consonancia a las sombras, para encontrar una salida digna y continuar. Porque la vida es compleja, mezcla de dolor y satisfacción, y cuando sentimos un oscuro letargo, hay que mirar hacia dentro y despertar.

Aquella muestra fue el inicio, la que rompió el estancamiento ante el acoso sufrido, que se amplía en Más allá del silencio para ser completada. Para recordar algo que siempre ha existido, para visibilizar algo que cada vez resuena con más fuerza: la salud mental. Para tomar conciencia y comprender que, a veces, para algunas personas, la vida puede llegar a carecer de sentido en algún momento.

Y de entre todas, antes paciencia y ahora silencio, se elige como la palabra clave. Porque en un momento desesperado supliqué paciencia y ahora voy más allá. Y es que no se puede encontrar la salida si se permanece en las sombras, junto a la oscuridad que las provoca.

 

“Ningún dolor podrá hacerme desistir. Así nací, así he vivido y es así que seguiré viviendo” fue la cita de Yayoi Kusama con la que Semíramis González daba comienzo a su texto curatorial en Santa Paciencia (Galería A Ciegas, Madrid, 2022). Unas palabras inspiradoras que llevé a mi obra en el audiovisual que se presenta como cierre a esta exposición, atendiendo también a otro párrafo de la historiadora:

“El arte como herramienta para la superación del dolor es fundamental, por eso Biassu no sólo muestra, sino que invita a ir más allá, a dejarse sostener y curar, sanar. Sus imágenes son poderosas; son metáforas de sensaciones que todos hemos sentido alguna vez.
“Santa paciencia” es un mantra que nos decimos a nosotros mismos para aguantar, pero en esta exposición también se nos invita al recogimiento, al acompañamiento y a la visibilidad. El dolor sólo puede superarse en compañía, el remedio sólo puede venir en no callar, en enfrentarnos con nuestros propios miedos y superarlos por nosotros y en conjunto con los demás”.

 

Y de aquel principio, este final. Para continuar y volver a empezar… las veces que haga falta.

TEXTOS OBRAS MÁS ALLÁ DEL SILENCIO

IKIGAI

Ikigai es un concepto japonés que significa razón de vivir o razón de ser, y forma parte de una filosofía centrada en dar sentido a la vida para hacer que valga la pena vivirla.

No es un don ni un regalo. Es un propósito que no necesita ser grandioso, una misión desarrollada a lo largo del tiempo que, según esta cultura, todos tenemos. Escondido en el interior, algunos lo han encontrado y otros lo siguen buscando.

Estas flores lo representan. Metáfora de nuestras propias necesidades.

AMNESIA

Pretendemos olvidar aquello que puede condicionar nuestra vida de un modo inadecuado, como mecanismo de defensa y negación, en el intento de que el dolor llegue a desaparecer, pero contrarrestar su herida emocional no siempre es posible; el recuerdo reprimido sigue ahí.

El dolor no desaparece por no ser recordado, y ocultarlo nos hace más frágiles. Nos convierte en un saco de golpes en el que cada vez nos sentiremos más vulnerables, en lucha constante, propensos a sufrir sin comprensión y a alterar nuestro mundo y nuestro ikigai.

ENGAÑO

Artimaña que, si nadie más siente ni ve, hará que callemos una y otra vez pues, reconocerla y desenmascararla requiere de unas habilidades que no siempre se poseen.

Aquí la trasformación de su esencia original, de la apariencia de quien dice ser y no es, para manipular, embaucar y controlar, apagando la luz de quien quiere que deje de brillar.

FAITH La conquista del mundo interior

Tentación. Juego en el que luchar y perder o retirarse y no ganar. Enseñanza sobre las consecuencias de nuestras elecciones ante la adversidad.

El objetivo, provocar al rival y que se autodestruya. La dificultad, autocontrolarse. El motivo, las piezas que nos representan se romperán en el enfrentamiento. El ganador, el que no entra al juego. La moraleja, que a veces una retirada a tiempo también es una victoria.

SANTA PACIENCIA

Las fuerzas que nos guían en la vida son las que nos ayudan a vivir de acuerdo a nuestros valores, principios y creencias, determinando nuestro comportamiento al actuar en sintonía con ellas.

Los pilares básicos son esenciales en nuestro camino, pero, ¿y si en algún momento dudamos de ellos?, ¿y si el dolor consigue minar y replantearnos incluso nuestra propia esencia?

El éxito para mantenerlos dependerá de las decisiones que tomemos en cada momento, a pesar de la frustración y la rabia que nos hagan sentir.

VENENO

Elemento nocivo. Sustancia dañina que posee la cualidad de contaminar y enfermar a su víctima con gran habilidad ya que, aunque no siempre es mortal, compromete la salud de un modo insospechado. De proceso complejo que puede ser rápido o llevar tiempo y mucha dedicación.

DESAFÍO

Cuando el veneno salpica comienza un malestar que puede no tener límites si su toxina es absorbida. Alterando nuestro funcionamiento y llevándonos al colapso si no se neutraliza, con el riesgo de crear un monstruo y desatar verdaderamente la locura inoculada.

CONFIDENCIAS

Cuando las heridas son emocionales son invisibles a los ojos. Si no reconocemos su existencia, no existen. Si no las sacamos a la luz, no saldrán de la oscuridad. Si no las compartimos, no encontraremos la ayuda que necesitamos.

La manzana blanca como alma que muestra sus heridas, a partir de alfileres que la atraviesan y hacen sombra a su luz.

CONTENCIÓN

Cuando la paciencia llega a su límite nuestro cuerpo reacciona a través de la ira, la emoción más física. Un instinto de protección que dependerá de la magnitud del peligro percibido y la vulnerabilidad que genere.

Si se desencadena puede llevarnos al caos, por lo que aprender a gestionarla es fundamental para evitar perder el control y superarla adecuadamente.

DARK La conquista del mundo exterior

Intimidación. Utopía. Juego en el que somos paralizados y sometidos por el miedo. Sin poder avanzar ni huir. Temerosos de lo que puede destruirnos, esperando al ataque sin más. Con la esperanza de que el opresor se apiade y nos deje en paz.

LUZ DE GAS (gaslighting)

Lastrados por un momento de vulnerabilidad es más fácil caer en las redes de quien pretenda aprovecharse de ello. La baja autoestima combinada con procesos de estrés, ansiedad y depresión puede resultar fatal ante un depredador.

Este comienza sembrando la duda, creando confusión, desgaste, mayor inseguridad y culpa, pudiendo acabar por aislar por completo a quien ya callaba.

TINIEBLAS

Cuando el mundo duele, pierde su color. Se vuelve gris y dejamos de comprenderlo. Ya no nos gusta, ya no lo queremos. Sentimos nostalgia por su recuerdo y la tristeza nos invade. La sonrisa se desdibuja y comienza el letargo. Estancados. Sin esperanza. Nuestra voz se pierde en la soledad y preferimos no ver ni sentir.

Casi sin pestañear, el rumbo de nuestra vida ha cambiado. Ahora, a la deriva.

ADVERTENCIA

Centinela del miedo. Prisionera de sí misma.

Desmotivación total en las cuatro dimensiones: física, mental, emocional y espiritual. Basada en experiencias previas que oscurecen por completo el alma. Con una insatisfacción tan grande que es imposible de gestionar. Al límite. Sin capacidad de resistir. En riesgo de abandonar la batalla y perder la lucha.

INTROSPECCIÓN

Son muchas las causas que pueden mantenernos en la oscuridad, con la mente y las emociones quebradas si no hemos sido capaces de abordarlas. Pero el alma, formada por heridas acumuladas y otros miedos, también contiene sueños e ilusiones; aunque parezcan perdidos.

Aferrarnos a algo o a alguien que propicie un nuevo amanecer es clave en este crepúsculo, porque despertar del letargo sigue siendo el propósito.

AGITADOR DE ENFERMEDAD

La vida duele y, al sentirnos heridos, en ocasiones, cuando el ánimo no encuentra otra salida, recurre a sustancias como alivio y escape.

De adicción silenciosa, dan forma a un círculo vicioso con efectos secundarios que pueden llegar a acabar en finales fatales. Porque las adicciones no solo no resuelven el problema, sino que además lo multiplican de manera imprevisible.

ABISMO

Si no somos capaces de aceptar el sufrimiento y nuestra vulnerabilidad coge las riendas, el peso del vacío puede ser insoportable y generar situaciones sin vuelta atrás.

Entregarnos para que deje de doler no es la solución. Esperar un poco más puede propiciar un cambio, una evolución que consiga que el camino se despeje y nos permita salir del precipicio con éxito, sanos y salvos.

SUBLIMACION

Cuando solo queda la piel. Cuando las almas se han evaporado. Indefensas. Rendidas entre dudas y miedos. Ya no necesitan la coraza que las sustentaba en sus últimos días. Ya no pueden sentir las caricias. La piel ya es solo piel; sin vida.

(IN)-ÚTILES

Los recursos necesarios para tratar las secuelas emocionales y psicológicas no siempre son adecuados. A veces no sirven, o son limitados, inalcanzables o rechazados.

La afección comprende trastornos con diferentes grados de angustia y riesgos y, aunque cada vez la preocupación y la sensibilidad es mayor, salir del laberinto sigue siendo complicado por la dificultad de su diagnóstico, tratamiento y cura.

No darnos por vencidos es fundamental para recuperar el bienestar.

LIBERACIÓN

Romper el silencio y coger aliento. Dejar de callar para volver a la vida y continuar. Aunque no siempre agrade, no siempre sea fácil y no siempre sea posible.

Porque las emociones no se disuelven sin más; hay que reconocerlas y hacerles frente, ahondando en nosotros mismos para encontrar la respuesta. Para tomar la mejor salida. Para hallar la mejor solución. Recordando que, cuando nada es seguro, todo es posible.

FOUR DIMENSIONS. ESTIGMA VS VIRTUD

Superación. Reconstrucción de las cuatro dimensiones.

Armonía y serenidad del alma. Fin de un largo y tormentoso proceso que acaba para recuperar la autoestima, la identidad y el anhelado ikigai. Porque admitir la fragilidad es una forma de crecer, de entender que lo que nos diferencia es parte de nuestro potencial, y poder volver a estar completos a pesar de su huella.

SANTA PACIENCIA

Texto curatorial de Semíramis González

“Ningún dolor podrá hacerme desistir. Así nací, así he vivido y es así que seguiré viviendo” Yayoi Kusama
Sara Biassu trabaja con la perspectiva de plasmar en su práctica artística las emociones que vivimos las personas. Si en series anteriores tanteaba cómo sugerir el dolor y la superación, en “Santa paciencia” retoma este hilo de convertir lo visual en un paso más para la sanación, para el avance. Cualquiera de nosotros podrá entender a la perfección qué plantea esta exposición en cuanto vea las obras: son piezas que visibilizan la soledad, el dolor, la tristeza o la frustración para poner de relieve que hay pasos más allá gracias al apoyo externo y a la reconciliación con uno mismo.
En dos años de pandemia hemos aprendido que palabras como soledad, aislamiento, muerte o angustia tenían otro significado; la salud mental (tradicionalmente un tabú social) se convertía en algo visible que atajar incluso desde los gobiernos para el bienestar de la ciudadanía. El arte como herramienta para la superación del dolor es fundamental, por eso Biassu no sólo muestra, sino que invita a ir más allá, a dejarse sostener y curar, sanar.
Sus imágenes son poderosas; son metáforas de sensaciones que todos hemos sentido alguna vez.
“Santa paciencia” es un mantra que nos decimos a nosotros mismos para aguantar, pero en esta exposición también se nos invita al recogimiento, al acompañamiento y a la visibilidad. El dolor sólo puede superarse en compañía, el remedio sólo puede venir en no callar, en enfrentarnos con nuestros propios miedos y superarlos por nosotros y en conjunto con los demás.

SANTA PACIENCIA

Sobre la exposición

Santa Paciencia cuenta a través de una selección de obras los posibles estados y procesos por los que pasan las emociones y la mente ante cualquier adversidad que nos hace sentir vulnerables, como metáforas de momentos oscuros en las diferentes fases críticas de la vida que, más que vivir, nos llevan a sobrevivir e incluso a desear dejar de hacerlo.

La exposición narra el viaje del alma que puede pasar por todas las diversas situaciones planteadas, permanecer en alguna de ellas estancados, o llegar a uno u otro final sin pasar por alguna de las demás, con especial atención a que, para poder sanar y continuar, hay que tener en cuenta que la vida se alimenta tanto de luz como de oscuridad, por lo que debemos aceptar y vivir en consonancia con las sombras; porque la vida es compleja, mezcla de dolor y satisfacción.

Ante una muestra multidisciplinar muy concreta, ofrece la posibilidad de mirar de frente y tomar conciencia sobre un tema tabú que se ha convertido en una nueva pandemia que, aunque siempre ha existido, ahora resuena con más fuerza por la necesidad de su identificación y el encuentro de una salida digna y positiva a un pronóstico altamente preocupante, en el que la vida puede llegar a carecer de sentido.

Y de entre todas las posibilidades, Paciencia se elige como la palabra mágica y, de ella, Santa Paciencia como la capacidad sin la cual el proceso no podrá tener éxito pues, cada paso necesita su tiempo, además de un apoyo sólido que a veces cuesta encontrar; como la salida, que será más fácil de hallar en compañía, siempre desde uno mismo, para ganar una de las mayores batallas, la del dolor psíquico: el dolor del alma.

Y para demostrar que se puede salir de la oscuridad, esta exposición como la propia catarsis de la artista, con la que aprender a aceptar y continuar porque, como dijo Carl Jung, “Lo que niegas te somete, lo que aceptas te transforma” y “Quien mira hacia adentro, despierta”.

BELLA Y BESTIA

Bella y bestia es una metáfora sobre la terrible lacra social de la violencia de género a partir de un relato reconocible y común a muchas.

La obra surge de la reflexión de una historia real en la que el hombre nunca dejó de ser bestia. Síntesis de complejos momentos que inspiran silencio, contención y soledad, ofreciendo desde lo bello y sutil un delicado y a la vez contundente reflejo de la relación entre la luz y la oscuridad, atendiendo a las características de los materiales y pudiendo imaginar con ellos un sinfín de posibilidades en su desenlace.

Bella y bestia muestra la fragilidad, la sumisión y la incertidumbre de la que permanece encadenada a su verdugo, representada por una bandeja de porcelana encadenada a un martillo: su amado, su amo, del que es cautiva, presa del miedo, al acecho de su poder, de su tormento. En un mundo tan hermoso como perverso, en el que se sugiere lo que no es amor, lo que no es bienvenido… lo que no debe ser admitido.

BLANCO SOBRE BLANCO

Entre luces y sombras (Texto 1)

Somos luces y sombras. Un claroscuro más o menos expresivo en el que nuestras manifestaciones no son siempre perceptibles. A veces quedan ocultas, en lo íntimo, en la oscuridad; en un mundo tan hermoso como perverso, en el que somos capaces de lo mejor y de lo peor.

Creadores de nuestras propias tinieblas, éstas se acentúan si las dejamos crecer, y las virtudes cederán ante los defectos, y éstos, llevados a su extremo, acabarán arrebatando la luz, la propia y la ajena.

Y así la luz y su ausencia como metáfora. Y de la luz el blanco, la pureza, la bondad, la armonía y la fragilidad; y del mismo modo el negro como oscuridad, como dominante y creador de sombras, portador de intranquilidad y de maldad, que en su beneficio deja tras su estallido marcas perturbadoras y huellas de su perjuicio, de su falta de luz.

La dualidad estará siempre presente, suponiendo un reto en su provocación, y cuando el ego gane, cuando domine su interés, éste se impondrá y herirá; y a más triunfo, mayor desprecio, y la armonía se ausentará a la par que la luz, recluida por el egoísmo de hacer sufrir, sometida y reprimida, en su oculta realidad, frente al interés del ser frustrado, oscuro.

Al principio de suave dominación, para luego oprimir con más fuerza, con mayor presión. Y en su libertinaje acabar con la libertad de quien emana luz, a quien poco a poco apagará con su irracional crueldad.

Antagónicos, en busca de equilibrio, de su justa medida, el bien y el mal se manifiestan en el comportamiento a través de elecciones, de nuestras acciones. Se apoderan en detrimento el uno del otro, como parte de nosotros mismos, de nuestro reflejo, de nuestra propia personalidad.

Identificar la oscuridad no siempre es fácil, en su constitución sigue albergando luz, en ocasiones la suficiente como para manipular y mantener en secreto su naturaleza, su verdadera esencia. No todo el mundo, no todo el tiempo… pero somos y vivimos entre luces y sombras.

Y del blanco impoluto, cuanto menos blanco seamos, en más blanco nos convertiremos, objeto y objetivo de la maldad.

Y así comienza esta historia, el cuento del blanco sobre blanco, de la luz frente a la oscuridad…

 

Ver BLANCO SOBRE BLANCO en la visita de Atónitos Huéspedes a la exposición pinchando aquí _ Somos luces y sombras.

BLANCO SOBRE BLANCO

La historia y sus analogías (Texto 2)

Érase una vez la que se dejó querer y dijo sí. La que lucía blanca y dejó de serlo, porque en algún momento dijo no.

Es recuerdo porque fue y ya no es, porque no quiso, y si no quería no convenía, no inspiraba respeto, no era digna, solo un objeto, un blanco, su blanco.

Sin esperarlo surgió el Recelo, la inquietud y el deterioro, y de su desgaste la rotura, todavía controlada, doblegada. Y de la incomprensión hacia la pérdida, la desconfianza; y con la sospecha, el rechazo, de quien receló y de quien se sospechó, y de su encuentro el desencuentro, el enfrentamiento; y de él el Germen, el principio del fin. Y se instaló la oscuridad, conteniendo la semilla de la intranquilidad, que inevitablemente creció y desarrolló su mal, su patógeno, la enfermedad.

Del temor dependerá su estado. Discreto, proporcional a su poder, y El arte del silencio recaerá sobre el reflejo de quien teme, y de quien hacer temer.

Y perderán su fuerza los Sueños contenidos. Su brillo, su luz. Mermarán hasta perecer con el tiempo, ante su olvido. Y si antes o después la ira se descontrola, de la demostración de su dominio la Perturbación del sueño, de su rabia el resultado.

Del sueño lastimado desaparecerá la luz. La esencia contenida se sumirá en la tristeza, dejará cabida sin querer a la oscuridad, su oscuridad; y la Evidencia siempre al acecho, junto a su lecho, a pesar de su despecho, preparada para rodar, rodar y voltear, voltear y dañar. Derribar a la presa, a la prisionera.

Y sin descanso su Obsesión, a la que volver una y otra vez, por propia satisfacción, una y otra vez, sin explicación.

Y ante la Debilidad se fortalece la oscuridad, ejerciendo mayor presión, haciéndola más vulnerable al temor, y de su querencia el mayor riesgo, el compartido con el fruto de su ser. Y por creerse más segura, y culpable, mantenerse más sumisa, por sentirse responsable.

En una Distopía constante, vejada una y otra vez, despojada de todo, alejada de todos. Consciente de su Privación, de su decadencia, a su soledad acechaba el declive, la destrucción. Y aun así dar hasta no poder más, Hasta la saciedad, aunque marchitara y pereciera en el intento, ante la pena de su cautiverio, en su hogar, su tormento.

Condenada sin luz ofrecía su bien, soportaba su mal, resignada, hasta su último aliento, porque su generosidad no entendía de humillaciones. Su unión era mayor que el dolor y la insatisfacción. Ligada a su desventura, a la desesperación, pues cualquier excusa validaba la manipulación.

Una mirada al infinito bastaba. Los fantasmas crecían, como avispas, incluso del vacío, y traían con ellas Tiempo de nieves y ventiscas.

Sabía que si resquebrajaba todo lo que soportaba caería, y si rompía, sufrirían su fractura. Y desgastada, debilitada y agrietada suplicaba, y pensaba: si Yo craquelo, tú craquelas... y la verdad se sabrá, nuestra verdad.

Y calló, menospreciada, enmudecida por el disparate, como un objeto inservible, a la deriva. De blanco puro a blanco denostado.

Y los Fragmentos cada vez más abundantes, más cortantes, más incomponibles. La pérdida de su voluntad ya irreversible.

Sus pedazos y astillas más insoportables, sin pausa, y así siempre. En busca incesante de su Buen provecho, para poder digerir, moliendo sin parar los obstáculos de la oscuridad. Una y otra vez, y así siempre. Y a cuanta más fatiga más a moler. Y para no decaer, para digerir, soportar y continuar.

Y es que ser la buena esposa era solo un ideal, una quimera, una ilusión, pues la oscuridad no entendía de luz. Y a su pesar, siempre a mano el manual, para su control, su corrección. Y del Ideario lo que se supone que se poseía: pureza, mesura, docilidad y amor, pero no bastaron, nunca se buscaron.

Resistir sin cesar, sin dejar rastro, aunque no siempre es posible, antes o después la certeza se hace visible, sale a la luz.

¿Y si alguien se alza y atento la observa y la guía, como un Vigía?, pero, ¿y si nunca tan cerca como quien la desafía?, ¿nunca tan protector como su captor?

¿Y si no?, ¿dejarla sin más entre las sombras de la oscuridad?, ¿renunciar a la luz?, ¿a su brillo, a su esplendor?…

Y algunas veces, colorín colorado, porque a veces no hay retorno, llega el fin y el cuento acaba sin final feliz.

El Blanco tornado en rojos rosados, azules morados y amarillos verdosos.

Y tras el último golpe se tiñe de sangre, se suma a la lista de blancos derribados, y la oscuridad vuelve a ganar la partida, a apagar una luz, a acabar con otra vida.

Y de una de ellas, Marisa, y a todas ellas, mi Blanco sobre blanco.

SPACE GAMES

Space Games agrupa una serie de obras en las que el espacio pictórico y el de la propia galería es intervenido con objetos cotidianos y de ficción, creando una nueva realidad, estableciendo nuevas asociaciones y simbolismos al vincular lo lúdico con la poética, entre blancos y negros, característica principal del trabajo de la artista.

Se expone una artificialidad ante la que reflexionar, un juego irónico y onírico en el que el espectador encontrará un mundo irreal no tan lejano a su propio universo, en el que las escenas se suceden como ventanas atemporales, entre lo próximo y lo lejano, la continuidad y la dispersión.

El espacio como eje principal de la abstracción de la realidad:

La muestra plantea el diálogo a partir de experiencias ajenas, a las que el espectador podrá vincularse en mayor o menor medida, creando su propio espacio entre ellas, entre las que encontrará piezas icónicas en la obra de la artista y otras de reciente creación en busca de la representación de lo intangible, así como la constatación de cuestiones como la sensibilidad del individuo, lo efímero del tiempo y sus posibilidades.

La poética gravitará por la sala evocando un cosmos complejo, en una sucesión de trabajos en suspensión de cronología imprecisa que parecen conversar y permanecer unidos por hilos invisibles en medio de un vacío creado a su vez por el propio espacio, reflejo de la existencia del ser; A veces ideal, en ocasiones espejismo y otras, sátira.

Juegos con los que poder mimetizarse y ser cómplice entre dudas y certezas, entre lo real y lo espectacular, cuestionando límites como consciencia-inconsciencia, presencia-ausencia, interior-exterior, en busca de nuevas analogías y referencias más allá de las establecidas por la artista.

El espacio como contenedor de espacios, de historias contenidas entre las que transitar sin prisa.

*La manipulación de la imagen como un juego de variables espacio-temporales y la materialización de nuevas utopías son la clave de este proyecto.

STRAWBERRY FIELDS

Strawberry Fields es una instalación formada por una pintura y un audio, ofreciendo al espectador la posibilidad de adentrarse en la obra de una forma sensorial más amplia, íntima e intensa, pudiendo recibir mayores sensaciones, diferenciadas y complementarias en el mismo acto y desde el primer momento.
A través de los auriculares el espectador comienza a formar parte de la obra de un modo táctil, pues le invita a acercarse a ella, a tocar y usar sus elementos, involucrandolo en su significado y posibilidades, encontrando en este gesto una de sus metáforas:

Al estirar el brazo para coger los cascos la acción recuerda a cuando vamos a coger el pomo de una puerta, dispuestos a adentrarnos en un espacio que, en este caso, es el cuadro.

 

El audio repite en bucle una composición de treinta minutos, con la idea de crear un ambiente extraño, incierto, oscuro e irreal con el que sentirse envuelto en una especie de vacío atemporal, alejándonos de lo conocido, haciéndonos sentir solos ante la imagen para observarla en su plenitud y mimetizarnos con ella, pudiendo variar la percepción dependiendo del momento en que se escuche el audio, que difícilmente se encontrará en el mismo punto si se repite la acción, pudiendo ser las nuevas experiencias diferentes e infinitas.

 

Nunca se vuelve a sentir lo mismo que la primera vez, ni se vuelve a estar en el mismo lugar de la misma manera…

 

Los sonidos evocan y abstraen a un mundo onírico y psicodélico, a la par que sigue siendo real, semejante a un recuerdo distorsionado o a una ficción que traspasa lo alguna vez imaginado, pretendiendo alterar la percepción del tiempo y del espacio del espectador, así como el sentido de su propia identidad, ofreciendo una vía de escape a los límites de la conciencia, ante una alegoría cargada de símbolos del imaginario colectivo, fácilmente reconocibles, a la espera de descubrir lo que realmente oculta: una mirada al interior.
La instalación invita al espectador a que también vaya más allá, dejándose llevar incluso a ser uno de sus protagonistas, frente a los demás, entre la duda de ser el observador o el observado y, según la respuesta, hasta el temor a su destino.
El cuadro contiene las primeras metáforas que encuentra el visitante, aunque de un primer golpe de vista quizá no sea consciente, partiendo la imagen de una fotografía antigua intervenida con trazos pictóricos con los que se añaden u ocultan elementos en base a su significado. Analizada con más detalle, se desglosa de la siguiente manera:

 

– Los protagonistas son un grupo de niños que nos miran desde lo que parece ser un abismo, en un vacío absoluto, suspendidos en un fondo blanco, asépticos, sin sujeción.

– Sus rostros no reflejan ningún sentimiento concreto: ni felicidad, ni tristeza, ni temor…

– El dorado de sus vestimentas enfatiza su situación privilegiada, su valor como menores, protegidos, como si de una coraza se tratase, suponiendo a su edad una considerable condición de vulnerabilidad y una mayor necesidad de cuidado y tutela.

– La silueta define a quien forma parte de su educación/formación, oculta, quedando anónima por deber tratarse de cualquier persona adulta, y a la vez, desaparecida, incrementando la incertidumbre de los protagonistas: solos ante su suerte, rodeados de una duda constante.

– Los objetos voladores que los acompañan incrementan la inquietud de la que son y forman parte, aludiendo a la misma fragilidad e inseguridad a la que nos enfrentamos, generación tras generación, en los diferentes ámbitos de la vida y durante las diferentes etapas, una y otra vez, inevitablemente.

 

Incertidumbre, vacío, soledad y recuerdos velados son algunos de los conceptos tratados en la instalación pero, también lo son la ilusión y el optimismo, pues toma el título de la canción “Strawberry Fields Forever”, de la banda The Beatles, sirviéndose de sus dos primeras palabras, “Campos de Fresas” en su traducción, dejando el título de la obra en inglés, como alusión directa a dicha pieza musical y a su historia, pudiendo ser su melodía y letra parte de la obra pues, aunque aparentemente nada tienen que ver con la instalación por su ausencia, ahí concretamente reside su explicación, pudiendo ser susurrada mientras se contempla y se escucha la imagen, siendo un elemento simbólico más en una inquietante y misteriosa composición, que no es más que el reflejo de una sociedad que duda, teme y se paraliza ante lo desconocido, pudiendo estar rodeados de gente y aun así sentirnos solos (enfatizando este concepto al romper con los demás en el propio espacio de la exposición al ponerse los cascos, al escuchar en soledad y de una manera íntima un sonido extraño y oscuro, a merced de sensaciones inciertas e inesperadas, deseadas o no).

 

“Déjame llevarte a los campos de fresas, donde nada es real, donde no hay nada de lo que preocuparse, donde vivir es fácil con los ojos cerrados,

sin comprender nada de lo que ves, porque es complicado ser alguien, pero todo sale bien […] Campos de fresas por siempre…”, dice la letra.

 

Sobre la metáfora de los Campos de Fresas, su presencia queda en la esencia de los protagonistas, en el recuerdo de buenos momentos que ofrecen bienestar, permaneciendo desde lo más profundo del alma, inherentes a la tan necesaria esperanza que nos hace continuar aún en las circunstancias más inciertas, dejando la ironía de la obra y su juego de símbolos en la anécdota de una introspección forzada, como parte de la dualidad de la vida y del propio ser, en constante cambio y aceptación, frente a un análisis reflejo de la existencia y de sus consecuencias, entre las que ser, estar y continuar.

BLUE INTROSPECTION

Obra experimental, Site-Specific, creada para la Fachada Media de ETOPIA, Centro de Arte y Tecnología en Zaragoza.
Sin sonido, con 3 minutos de duración, sobre dos caras del edificio, un cubo con superficie led en la Milla Digital de Zaragoza, emitida en bucle desde el atardecer, en un espacio abierto, con un exterior transitable, entre abril y mayo de 2018, tras la III Academia de Fachada Media, formación especializada para artistas visuales dentro del programa SmARTplaces.

La composición es creada en base al diálogo entre mi propio ser y la superficie a exponer, de la comunicación que surge con el espacio que rodea al edificio y de sus posibilidades de visionado, más o menos fortuito, desde diferentes distancias y ángulos, durante la noche, momento de falta de claridad, escenario de historias de miedo, de soledad, de diversión y ruido, de secretos y silencios, de aullidos… resultando una obra muy personal e irónicamente íntima.

La obra hace referencia a las conexiones invisibles del “yo” y del edificio, entre ellos y por separado, como entes interdependientes, interrelacionados e indivisibles.

Mediante su simbiosis ambos muestran en sus exteriores el interior, combinando elementos reconocibles que recrean pulsiones e impulsos químicos y eléctricos y sus reacciones, en conexiones progresivas que los identifican por separado y a la vez los une ante la dulce o dura mirada del espectador.

Blue Introspection supone una comunicación interior/exterior en busca de la consciencia, en un juego visual cargado de metáforas que invita al público a mirar mientras se sienten observados, expuestos, a merced de lo que rodea sus aspectos más intangibles, la propia esencia, a través de la energía que conecta las manifestaciones, siendo las respuestas proporcionales a la fuerza del proceso en el que nos encontramos, buscando en la introspección el equilibrio entre deseos, necesidades y oportunidades.

ENTRE LA NOCHE Y EL DÍA

Lydia vive sola, en la casa donde se crio junto a su familia.

Entre sus cabellos rojizos su sonrisa se desdibuja cada noche y su mirada permanece perdida cada día, calando en lo más profundo de su alma.

El por qué, solo ella lo sabe… o cree saberlo.

Su esencia ya solo se manifiesta cuando es capaz de encontrar un lugar en el que sentirse a salvo, en el mundo onírico de los sueños; y ni siquiera allí está segura.

La oscuridad es cómplice de su mal, que lo multiplica y lo intensifica, perjudicándola más allá del entorno donde se origina.

Sabe que el problema no está en ella, y que no supone un peligro en sí mismo, pero sus continuos desvelos la mantienen en un constante caos que la deteriora cada noche, con consecuencias más allá de la falta de sueño, llegando a poner en peligro su vida; y no puede más.

Consciente de que se encuentra en terreno hostil, en el que no hay reglas y donde el tiempo juega en su contra, debe elegir entre su hogar o su propia vida.

Sin alternativas deseables, toma la decisión más dolorosa…

No hay vuelta atrás.

BAJO  AMENAZA

Manual  Visual  de  Supervivencia
Surge la  historia  de  un  perjuicio  menor  que, reiterado  en  el  tiempo, causa  un  daño  del  que  nadie  se  responsabiliza. De  este  modo, quien  lo  sufre, constituye  una amenaza  para  el beneficiado, pues  supone el  peligro  que  corren  sus  intereses. Y antes  de  dar  opción  a  defensa, ataca.

La amenaza  es  amenazada  y  la  libertad  pasa  a  ser  una  UTOPÍA.

Y así  comienza  la  exposición, con  el  anhelo  de  lo  perdido  por  voluntad  ajena, representando  unos  llamativos  zapatos  lo  que  se  quiere  y  no  se  tiene.

Preside la  sala  AMENAZA-DA, paralizada ante  lo  servido: dos  palabras; indefensa, al  otro  lado, despojada  de  su  derecho, en  el  interior, frente  a  la  amenaza.

El resto  son  posibles  partes  del  proceso  que  voluntaria  o  involuntariamente  se  vivirán, pudiendo  quedarse  en  cualquiera  de  ellas  o  finalizar  el  recorrido  hasta  el  objetivo.

PRIMERA LECCIÓN  avisa: el  camino  es  duro, si  no  estás  preparada  no  continúes; y  si  decides  hacerlo, ten  en  cuenta  que  no  todos  aquellos  que  puedan  te  ayudarán, porque  no  todos  los  ÚTILES  estarán  dispuestos, y  comprenderás  que  antes  de  continuar  debes  esperar, guardar  SILENCIO, NO TOCAR, hacerte fuerte  para  soportar.

Llegará después  la  VENGANZA, igual o  peor  a  lo  prometido. Temida, no  querida  pero:  nada  es  para  siempre  y  todo  lleva  su  proceso. Y  tras  ella  el  desánimo, lo  pretendido, el  CONTENEDOR DE  INICIATIVAS, por si  no  te  ves  capaz, como  refugio  y  falsa  liberación; y  unos  pasos  más  allá, si  se  encuentra  la  fuerza  necesaria, la  recompensa. La esperanza  ilumina  el  último  tramo  y  se  consigue  la  tan  ansiada  libertad… AMÉN.

 

«Bastan dos palabras para paralizar el alma. Recuperar su estado solo una: Coraje»

UTOPÍA

Si está presente, sucederá

AMENAZA-DA

Quien teme, hace temer

PRIMERA  LECCIÓN

Si no quieres, no desees

(IN-) ÚTILES

La capacidad no siempre es servible

SILENCIO, NO TOCAR

Antes de actuar, observar

VENGANZA

Si es inevitable, pasará

CONTENEDOR DE INICIATIVAS

El valor está en el interior. No desistir

AMÉN

(Así sea) La virtud recompensará el esfuerzo

IN  AETERNUM
«Tantos  siglos, tantos  mundos, tanto  espacio… y  coincidir»

Silvio  Rodríguez

 

Mi  casa, mi  hogar.

Mi  madre, mi  hermano, mi  padre  y  yo.

Días, recuerdos, alegrías  y  tristezas.

Para  siempre, mi  Familia.

RÉQUIEM  POR  UN  INSTANTE
De  la  oscuridad  emerge  una  figura  que  recorre  el  camino  hacia  el  final  de  todo: de  la  alegría  y  de  la  tristeza, de  la  esperanza  y  del  miedo… y  aunque  la  presencia  de  un  recuerdo  se  haga  permanente, ante  ella  han  de  apagarse  las  voces  para  escuchar  el  silencio  que  deja  tras  de  sí  lo  perdido.

La  obra  interpreta  el  final  de  historias  capaces  de  resquebrajar  el  alma, que  nacen  y  mueren  a  la  vez, para  no  ser  olvidadas; momentos  efímeros  surgidos  de  una  nada  acechante.

DESDE  NUNCA  JAMÁS…

A  cada  paso  el  tiempo  nos  descubre  cómo  se  incorporan  a  nuestro  ser  sensaciones  y  experiencias  con  las  que  en  nuestros  primeros  años  no  hubiéramos  soñado  ni  llegado  a  creer.

Al  crecer  nos  abordan  y  desbordan  en  diversas  situaciones, complementándonos  a  cada  segundo; haciéndonos  preocupar  por  decorar  su  sentido  para  vivirlo  menos  cruel, a  modo  de  supervivencia  o  de  defensa  como  escusa  de  su  causa. La  Realidad   nos  acecha, encontrada  de  frente, conformando  nuestra  personalidad  al  tomarla  a sorbos, debiendo  aprender  a  administrarla  en  su  dosis  justa, para  no  caer  así  en  ella  eternamente. Miedo, rabia, dolor, inquietud, locura… son  algunas  de  las  muchas  respuestas  que  hay  que  saber  cómo, dónde  y  cuándo  tomar, pues  quizá  resida  en  su  elección  (y  en  sus  consecuencias)  la  esencia  de  cada  una  de  nuestras  vidas… que  comenzaron  a  ser  desde  nunca  jamás.

POR  TI  DEJARÍA  VOLAR  MIS  SECRETOS  MÁS  OCULTOS

En  ocasiones, los  hechos  más  trascendentes  de  una  vida, al  permanecer  ocultos, se  transforman, cambian  su  sentido, se  vuelven  insospechados, inocuos, inexistentes… y  dejan  de  poseer  la  opción  de  ser  disfrutados, incluso  cuando  acompañan  al  ser  con  incomparable  arraigo  desde  tiempos  casi  olvidados.

Tanto  deseos  como  secretos  no  son  más  que  preocupaciones  que  abogan  a  la  espera  de  ser  libres, resueltos  o  compartidos  porque, si  no  lo  son, no  existen. Juntos  forman  un  microcosmos  de  incertidumbre  que  acecha  desde  lo  alto, desde  donde  su  levedad  se  torna  sólida, pesada  e  insostenible.

Algunos  jamás  pretenderán  sobrepasar  su  inquietante  irrealidad, pues  nunca  estarán  preparados  para  ser  vividos, percibidos  ni  recordados. Solo  al  ser  despojados  de  su  carga  llegarán  a  su  fin, pudiendo  dar  comienzo  a  nuevos  acontecimientos; y  con  ellos, a  nuevos  secretos  con  los  que  volver  a  sentir, soñar  y  disfrutar.

El  motivo  por  el  que  desprenderse  de  tan  preciado  botín  es  personal  e  intransferible, y  solo  resultará  eficaz  cuando  el  valor  del  nuevo  encuentro  sea  merecedor  de  semejante  reto.

Mi  mayor  secreto  es  que  por  ti  dejaría  volar  mis  secretos  más  ocultos. El  motivo, tú.

PASADO

En  la  aventura  del  vivir  es  necesario  el  regreso  al  pasado, a  los  recuerdos.

La  cápsula  del  tiempo  te  ayudará  a  revivirlos  y  redescubrirlos. Administrarla  y  protegerla  es  tu  misión, pues  en  su  interior  guarda  gran  parte  de  tu  ilusión.

PRESENTE

En  la  aventura  del  saber  es  quizá  lo  más  complejo  el  conocimiento  del  propio  ser.

Tomar  conciencia  del  presente  transforma  la  realidad  como  la  metamorfosis  a  una  mariposa; que  al  renacer  lo  hace  bella, orgullosa, llena  de  vida  y  en  libertad.

FUTURO

En  la  aventura  del  sentir  es  inherente  al  hombre  la  capacidad  de  sufrir. Ante  el  futuro, las  dudas  lo  producen.

La  infusión  de  dolor  te  administrará  la  dosis  justa. Cómo, dónde  y  cuándo  tomarla  es  tu  decisión.

PAPILLÓN

Papillón  es  el  escenario  de  una  secuencia, de  un  instante  que  surge  tras  la  mayor  necesidad  del  hombre: sentirse  libre  desde  los  más  profundo  de  su  ser.

De  sus  entrañas  florece  el  deseo  de  libertad  y  el  mayor  desafío, pues  una  cualidad  tan  arraigada  al  espíritu  no  puede  más  que  producir  el  más  intenso  y  peligroso  dolor, ante  el  que  se  debe  recorrer  la  distancia  que  nos  separa  de  lo  que  nos  pertenece  por  derecho, la  felicidad, dejando  de  soñar  para  comenzar  a  vivir.

Como  hiciera  Henri  Charrière  en  su  novela, llevada  al  cine  por  F. J. Schaffner, Papillón  manifiesta  el  esfuerzo  por  sobrevivir  en  un  espacio  aislado  del  mundo, defendiendo  la  poca  dignidad  que  puede  conservarse  en  un  lugar  en  el  que  no  se  está  preparado  para  estar; desde  donde, tras  numerosos  intentos  de  fuga, se  consigue  la  tan  ansiada  liberación.

ORIGEN

Toda  historia  tiene  en  su  origen  la  parte  fundamental  de  su  recorrido  y  este  surge, en  la  mayoría  de  las  ocasiones, de  un  deseo  creado  por  la  necesidad  de  reformular  el  tiempo  y  convertir  su  cambio, constante  e  inevitablemente  mortal, en  eterno.

Origen  es  el  comienzo  de  un  relato  rebosante  de  reminiscencias  que  florecen  en  cada  pieza  tras  un  silencio  evocador; de  la  intención  de  contener  el  infinito, de  solidificar  lo  etéreo, inmortalizar  la  memoria  y  conservar  los  recuerdos.

En  el  origen  se  encuentra  la  primera  idea, el  germen  de  lo  que  luego  serán creaciones  más  complejas  a  las  que  les  sucederán  fases  y  estilos  que  marcarán  una  trayectoria  de  inicio  conocido  y  alcance  insospechado; a  partir  de  situaciones  reales, soñadas  o  anheladas  que  determinarán  la  historia  de  un  arte; como  demostración, atrevimiento  o  forma  de  vida.

INSTANTE  DE  LIBERACIÓN

Miedos, obligaciones, creencias… nos  mantienen  cada  noche  tras  la  ventana, soñando  con  la  vida  que  realmente  nos  gustaría  vivir.

La  luz  necesaria  no  la  encontraremos  allí. La  verdadera  energía  reside  en  nuestro  interior, único  lugar  desde  el  que  conseguiremos  la  libertad  necesaria  para  crear  todo  lo  que  seamos  capaces  de  imaginar.

IMPACTOS

Surgen  de  imprevisto, violentos, concretos, emocionalmente  intensos.

Provocan  el  cambio  de  los  que  se  encuentran  a  la  espera, de  los  que  viven  parados, contaminados.

Producen  una  agresión  que  más  que  destrucción, supone  la  más  anhelada  liberación.

METAMORFOSIS

 

Al  ser  conscientes  de  la  existencia  del  fin, tan  solo  podemos  aspirar  a  trascender  como  recuerdo.

Al  vivir  conservamos  una  conciencia  propia, adquirida  del  pasado, que  nos  aporta  la  memoria.

Condenada  a  olvidar  aunque  no  quiera, busca  refugio  en  su  interior  al  que  a  cada  segundo  le  precede  la  transformación.

PROXÉMICA

«Quiero  ser  yo  y, sin  dejar  de  serlo, ser  además  los  otros, adentrarme  en  la  totalidad  de  las  cosas  visibles  e  invisibles, extenderme  a  lo  ilimitado  del  espacio  y  prolongarme  a  lo  inacabable  del  tiempo.

De  no  serlo  todo  y  por  siempre, es  como  si  no  fuera, y  por  lo  menos  ser  todo  yo, y  serlo  para  siempre  jamás.»

 

M. Unamuno

FORMAS  DE  VIDA

Particulares  como  la  concepción  del  mundo, expresadas  en  todos  o  cualquiera  de  los  ámbitos  del  comportamiento, en  relación  con  los  demás  y  en  presencia  o  ausencia  de  todo  lo  demás. En  conjunto  de  actividades  saludables  o  nocivas. Maneras  de  vivir  conscientes  o  inconscientes. Formas  de  actuar, pensar  y  sentir. Elegidas  o  impuestas, fundamentales  o  superfluas.

Tan  diversas  como  intensas, tan  bellas  como  únicas.

ESPERA

No  hay  nada  tan  terrible  como  tener  que  enfrentarse  a  uno  mismo; a  los  pensamientos  nunca  dichos, a  los  sentimientos  jamás  disfrutados.

Permanecen  contenidos, conservados  en  estado  sólido, condenados  a  vivir  en  un  mundo  al  que  ya  no  pertenecen.

AL  VACÍO

El  tiempo  pasa  y  no  nos  damos  cuenta  pero, gracias  al  vacío  que  conserva, llegan  puros  e  inmaculados  para  cubrir  la  usencia  y  así poder  vivir  recordando  sin  que  duela.

Cada  pedazo  es  una  solución  que  te  concede  un  mejor  momento. Una  vez  consumido  ya  no  puede  resquebrajarse  jamás; queda  en  tu  recuerdo  como  un  testimonio  inmortal  de  tus  ganas  de  vivir  y  de  tu  vida.

Debes  fundir  cada  pensamiento  en  cada  segundo, y  encadenar  cada  sentimiento  a  la  eternidad  de  las  horas.

Te  son  entregados  para  hacer  de  tu  vida  lo  que  quieras, preservados  de  ser  marchitos, para  consumir  libremente, tan  refrescantes  como  una  caricia; para  recrearte  cada  día  en  la  belleza  de  las  cosas, para  que  duermas  cada  noche  en  un  tranquilo  sueño, encontrando  tu  camino, abandonando  tu  tristeza.

PENTIMENTOS  SOLIDIFICADOS

En  mar  de  intensas  sensaciones, con  olas  que  albergan  pensamientos, vagan  por  el  mundo  intentando  encontrarse  los  sentimientos.

En  ocasiones  algunos  lo  hacen, sin  desvanecer  en  el  intento, pues  en  ello  les  va  la  vida, donde  no  cabe  el  arrepentimiento.

El  destino  marca  el  encuentro, no  la  distancia  ni  tampoco  el  tiempo, de  los  que  navegan  por  eternos  mares  o  que  habitan  hermosos  reinos, paseando  entre  nubes  de  ilusiones  o  debatiéndose  indecisos  entre  deseos.

Se  paraliza  el  mundo, el  tiempo  se  detiene. Se  evaden  de  todo  lo  que  les  rodea, se  aíslan  en  único  universo, se  solidifican… Sin  nada  más, en  el  olvido  de  todo  lo  demás…

Mientras  tanto, entre  dulces  sueños, se  seducen  mutuamente. Se  acarician  hasta  estremecer, juegan  inocentes, ajenos  al  dolor; como  en  el  amor  dormido, donde  siempre  brilla  la  esperanza, alzándose  victoriosa  ante  la  ignorancia.

DULCE  ESPERA

Pequeñas  partículas  danzan, se  evaporan, flotan  sobre  sí  mientras  no  dejan  de  sentir.

Formol, pedazos  que  se  entrelazan  en  el  más  penetrante  anhelo.

Azúcar, dulce  y  perdido  en  el  apogeo.

Fin  del  acabar, comienzo  de  la  verdad.

Espera, ansiosa  espera. Del  destino, a  la  vida  o  la  muerte.